martes, 23 de febrero de 2016

Desde Santiago

Ya era hora de retomar, y que mejor que hacerlo con un cambio radical de vida: me he vuelto a dejar flequillo ¡eso si que es una locura!, además he dejado mi trabajo y me ha dado por irme a vivir a Santiago de Chile, así porque sí, sin razones ningunas. ¡Ah! también me dio por casarme, otra anécdota más...

Pues si amigos, se acabó una etapa en Valencia donde (1) al fin he podido trabajar con niños durante un año y descubrir que quiero seguir ese rumbo...(2) donde tras un primer piso compartido caótico y para olvidar he descubierto otro en el que me he sentido como en casa... (3) de la que me llevo personas importantes y otras no tanto.

Ahora toca centrarse en Chile y sacar todo lo bueno (que no es poco) de esta experiencia.

Parece mentira pero ya llevo una semana intensa por aquí, la bienvenida fue genial x) con piscina incluída, el calorazo veraniego que hace aquí no es tan genial pero ya me voy adaptando.
Vida de ricos
El fin de semana también fue grande, de cabaña internacional en la playa, no una playa de Benidorm, sino de esas con acantilado que me gustan a mí. Y esta semana será la de despedir múltiples veces a H., una de las mejores amigas de Saintson aquí.

Algarrobo 1


Algarrobo 2


¿El resto del tiempo qué hago? esperar, mirar cosas por internet, y jugar al Candy Crush.Básicamente.

Desayunos en la terraza

Estoy dándome cuenta de la paciencia que voy a ganar y de lo mucho que odio la burocracia y su lentitud...